En los últimos años decenas de nuevos núcleos de población se han construido en todo Irán bajo el proyecto de viviendas sociales Maskan-e Mehr: un total de 17 nuevas ciudades y alrededor de 1,5 millones de viviendas con el objetivo de revertir la migración a las ciudades más grandes, donde los niveles de vida se están deteriorando debido al tráfico, la contaminación y el alto precio de la vivienda.
Estas comunidades se erigieron en medios áridos, casi desérticos, como en Pardis (análogo a ‘paraiso’ en persa, a media hora al noreste de Teherán), a menudo con poca consideración por las condiciones ecológicas en el terreno. El plan era equipar a cada comunidad con una amplia gama de servicios: transporte público, parques, hospitales, escuelas, mezquitas, pero la implementación real de estos planes pronto demostró ser un fracaso. La tasa de inflación disparada, así como el endurecimiento de las sanciones internacionales hicieron que estas empresas no fueran rentables para los promotores, lo que les llevó a abandonar muchos proyectos a mitad de la construcción. Unas 200,000 unidades carecían de acceso a sistemas de agua, calefacción y alcantarillado. La empresa no logró su objetivo de proporcionar vivienda a los desfavorecidos. Finalmente, el plan de vivienda Maskan-e Mehr finalmente ha resultado ser uno de los mayores obstáculos para la recuperación económica de Irán.
In recent years dozens of new urban centers have been built across Iran under the Maskan-e Mehr social housing project: a total of 17 new cities and around 1.5 million housing units with the main goal of reversing migration to larger cities, where living standards are deteriorating due to traffic, pollution and the high price of housing.
These communities were erected in arid, almost desertic environments, as in Pardis (analogous to ‘paradise’ in Persian, half an hour northeast of Tehran), often with little regard for ecological conditions on the ground. The plan was to equip each community with a wide range of services: public transportation, parks, hospitals, schools, mosques, but the actual implementation of these plans soon proved to be a failure. The soaring inflation rate, as well as the tightening international sanctions, made these ventures unprofitable for developers, leading them to jettison projects mid-construction. Some 200,000 units lacked access to water, heating and sewer systems. Finally, the Maskan-e Mehr housing plan has finally turned out to be one of the biggest obstacles to Iran’s economic recovery.
© text and pictures by Manolo Espaliu